Giro sentimental

Imaginate m'hijo

April 10, 2019

Hola, cómo estás. No esperaba encontrarte acá. Pero bueno, me alegra que hayas venido. Siempre tuve…una cierta simpatía por vos. Y podría tener más, si fueras un poco más simpática. El problema creo que está en tu boca. Sí, a ver, estirate el labio de abajo un poquito para la derecha. Ahí está. Una grampa por favor. Sí, ahí. Traten de fijarla bien. A ver, sonreíte. Sí, no está mal. Pero el labio de arriba esta muy grueso, rebajale un par de milímetros. No, tanto no, animal. Bueno, ponele un poco de cortisona. A ver, sonreíte. Fenómeno. Ahora levantá un poco la cabeza. Mucha pera, tenés. Tomá, pasate un poco de esto, vas a ver cómo te redondea. Después ponete crema, ¿sabés? Si no se te irrita. A ver, mirame. Tapate los ojos. Si, ¿ves? Ahora tenés una sonrisa interesante. Ta, podés cerrar la boca. Ponete de perfil que te quiero ver el largo de la nariz. Mmmm. Tomá, colocate esto, que te mide la profundidad de las narinas. Bárbaro. Te vas a tener que rebanar toda la parte de afuera del cartílago. Ahí va. Dale un poco más. Perfecto. Ahora dale un empujoncito al tabique. A ver de frente. Justo. Ahí. Sacate el pelo de la boca que no te veo bien. Che ¿a vos no te sobra un pómulo? Ah, no, está bien. Pero apretate el de la derecha un poco para adentro. El otro también, si no quedás muy chupada. Ahí está bien. Genial. Así me estas empezando a gustar. No mucho, pero…Mirá para allá, ¿a ver? Tomá, masticá este chicle que quiero ver cómo te queda la cara en movimiento. ¿Sabés que estás mal sentada? No, así no, ponete más en el borde. Juntá las piernas. Vas a tener que hacerte un injerto acá, porque no se te juntan del todo. Por ahí va bien. Che, qué caderas que tenés. Me parece que estoy sintiendo algo. Ah, no, creo que me equivoqué; hay que subirte un poco más la nariz. Pero no te la tuerzas. Servite, esto es para que te peles las cejas. Ahora dejátelas crecer pero hasta la mitá, nada más. No, te pasaste, retrocedé. Ahí, ahí está bien. Que mona. A ver ahora las orejas. Están bien, tenés lindos pabellones; hay que correrlos un poquito, nada más. Tomá, mirate en el espejo. ¿Tas quedando no? Creo que estoy sintiendo algo por vos, aunque todavía no sé qué es. Vení, acercate. No, tanto no, bestia. Dejame ver…date vuelta. Vas a tener que raparte, para poder poner este suplemento. Sabés que… estoy empezando a gustar de vos. Es extraño, nunca había sentido esto. Subí los brazos. Bajalos. No, hay algo mal, tienen que llegar hasta acá. Ah, no, es un problema de dedos, me parece. Tomá, probate éste. ¿Te queda cómodo? A ver, cerrá la mano. ¿Está bien? Bueno, recogete el pelo que te quiero analizar el cuello. Ah, no, no, esto está todo mal. Agachate. Vas a sentir un pequeño dolor, pero no te asustes que no es nada. Ahí está, perfecto. Se te notaba demasiado la yugular. Ahora dejate el cerquillo. Arrimate. Mordé, a ver. Cruzá los dientes que te tengo que ajustar el paladar. Ahí va, ¿ves? Ahora es otra cosa. ¿Sabés que me gustás mucho? Ah, no, esperá, quedate un poco quieta que se te torció el codo. Ponelo a ciento ochenta grados y tenelo así un ratito. Estoy un poco…confundido; creo que te amo. ¿A ver? No, todavía no. Siento algo pero creo que no es amor. Te quiero como amiga. Tomá, quemate esa verruga. No el lunar dejateló. No, mejor pasátelo para el otro lado. Mirame. Qué divina. ¿Qué tenés que hacer hoy de noche? No, esperá, te falta lijarte las rodillas. Te conviene doblarlas, así te das cuentas mejor. Bueno, está bien. Ahora tratá de adelgazar. De acá, sobre todo. Seguí. Dale un poco más. Creo que me estoy enamorando. ¿A ver? Mirame. Lástima tu color de ojos, pero no te los cambies, porque ya no serías vos. Yo te prefiero así, como sos.