Jonathan Harker,
Jonathan Harker
se despidió de su Mina,
de su jefe en la oficina,
y salió de la neblina
londinense en camino hacia el oriente,
donde residía su nuevo cliente.
Jonathan Harker,
Jonathan Harker,
lo mandaron desde Londres
hasta Transilvania, donde
debía transar con el conde Drácula.
Pasa que el conde,
Pasa que el conde
ya se había acreditado
toda sangre del condado
y en pos de un nuevo mercado
quiso establecerse allí en el continente,
y eligió Inglaterra para hincar el diente.
Jonathan Harker,
Jonathan Harker,
le arregló el tramiterío
y así el conde, en un navío
fue, surcando el mar bravío,
a implantar el señorío de su sombrío poder,
cosa que consiguió hacer
no sólo sobre un paciente
del hospital de dementes,
sino sobre la divina Mina,
la novia de Jonathan.
Jonathan Harker,
Jonathan Harker,
sin teñir mucho de rojo
su rostro con el enojo
fue por la sangre del ojo
a ver al doctor Van Helsing, el experto
en enderezar este tipo de entuertos.
Abraham Van Helsing,
Abraham Van Helsing,
como la historia destaca,
sin hacer mucha alharaca,
le clavó la estaca al conde Drácula.
Pero Van Helsing,
comprobó que Mina estaba,
ella también, contaminada,
y al pasar, como si nada,
le hizo también el favor
de liberar su alma y entonces
a ella también se la clavó.