Sabes que, por lo común, la gente
Tiene algo por qué vivir,
Un motivo para levantarse
de la cama o para no dejarla
Como ser mirar televisión.
Otros, con más amplitud de miras
viven para y por su vocación,
Y se entregan altruistamente
al estudio o al trabajo, Y otros
prefieren recorrer las viñas del señor.
Lo mejor que pudo a ti pasarte,
(Tú lo sabes tanto o más
que lo que yo puedo suponerlo)
(Me refiero a aquel mágico encuentro
que tan bien tu diario registró),
Lo mejor que te pasó en vida,
(tú lo dices siempre, y con razón)
Fue que nos hayamos conocido;
la modestia impide que lo diga
con lujo de detalles, pero es la verdad.
Soy lo máximo a que tú aspiras;
si me tienes eres feliz;
Pero en cambio si llego a faltarte,
sufres mucho y no tienes consuelo
Hasta que me vuelves a tener.
Pero ojo, hay que saber cuidarme,
Por que otro como yo no habrá
Que te colme las expectativas
y que sea el hombre de tus sueños
Y el dueño vitalicio de tu corazón.
Si no estoy contigo tú no existes,
No eres nada más que dolor
Y la angustia de estar esperando
que algún día Yo vuelva tu vida
y los dos podamos subsanar
Las heridas que en tu alma enferma
Se han abierto desde que me fui,
Y podamos la encontrar la forma
de que sepas retenerme, m’hija,
Sabiendo lo esencial que para ti yo soy.
Soy la luz al fin de tu camino,
Soy el premio por tu labor,
Soy la fruta del árbol prohibido,
pero Dios te concedió el permiso
de probar como era su sabor.
También soy el aire que respiras;
Soy la fuente de tu juventud;
Si me voy, tu cabello encanece
y tu piel se arruga totalmente;
Tu mente se diluye en algún mal senil
Yo te doy siempre lo que precisas,
La ternura, la comprensión,
El espíritu, la compañía,
la figura que tus ojos quieren
contemplar: la imagen de mi ser.
Cuando escuchan mi canción, las gentes
narcisista me acusan de ser,
Pero ignoran que yo no me gusto,
que eres tu quien desespera (¡y cómo!)
por verme, Pero yo por mi ni fu ni fa.
Yo no siento nada por mi mismo;
Considero que soy uno más,
Y aunque para ti sea importante,
yo me soy del todo indiferente,
Y esas cosas que sientes por mi
yo las siento por otra mujer.